Lo primero de todo, es un muy muy muy buen dramas. Tiene 26 capítulos (52 en realidad pero yo los cuento de dos en dos) y no me he hartado en ninguno de ellos, es más, me seguía gustando y picando. Seguía teniendo ganas de ver más y más y eso es toda una hazaña.
Ahora la reseña. Lo he acabado hace apenas diez minutos así que sigo con los sentimientos a flor de piel. Me ha gustado el final pero estoy cabreada, estoy muy cabreada. ¿En serio matan a Na Wang Shik? Me molesta muchísimo que hayan jugado así con él, tipo no poner planos suyos donde se vea claramente que sí, ha muerto porque me he pasado los últimos episodios pensando que en cualquier momento aparecería y... no, nunca aparece. Realmente le han matado. Le han matado y no ha podido cumplir nada de lo que se prometió a sí mismo. Él muere y todas las personas que literalmente le han jodido su vida siguen perfectamente vivos y bien. Es muy triste y me ha roto el corazón que los últimos meses de su vida fueran tan desgraciados sin ningún momento de paz, sin ningún momento de felicidad. Na Wang Shik se merecía algo mucho mejor.
En cuanto a lo demás, estoy muy orgullosa de Oh Sunny. Es una luchadora, es una persona muy fuerte y la quiero mucho. Estaba tan tranquila al principio, viviendo su vida con una sonrisa siempre y de repente se ve arrastrada a todo ese mundo de dolor e injusticia y me ha hecho muy feliz todo su progreso, cómo ha luchado por sí misma y por los demás. Quiero protegerla para siempre.
En cuanto al emperador, tengo sentimientos encontrados. Sé que es uno de los personajes con más recorrido a lo largo de la trama pero, a pesar de que me muestren su pasado, que siempre ha sido influenciado por su madre yo no puedo hacer como si nada. Es malo, es vil, mató a su primera esposa (aunque luego resultara que no), mató a la madre de Wang Shik, trató varias veces de acabar con la vida de la propia Oh Sunny sin ningún escrúpulo, así que no puedo hacer como si nada. No puedo perdonarle todas sus malas acciones solo porque al final se redimiera, Honestamente, merecía ese final.
Min Yoo Ra es otro personaje que me provoca sentimientos encontrados. También he podido llegar a entender que es víctima de las circunstancias pero se extravió demasiado, no supo dónde parar para no convertirse en el monstruo que acabó siendo y simplemente no puedo perdonarle todo, no puedo y me parece un final bastante benevolente el que se le ha dado.
En cuanto a los demás personajes como la gran emperatriz o la niñera se merecían algo peor porque ha sido tanto el dolor y el sufrimiento que han causado, han sido tan malas personas que cualquier castigo se me hace corto en ellas. Aun así disfruto ver como la gran emperatriz de Corea acaba acatando órdenes de otras presidiarias mientras sueña con un futuro que nunca llegará.
En resumidas, es muy buena serie, lo tiene todo y en dosis perfectamente distribuidas para hacerla exquisita y fácilmente entra en mi top 10 de series favoritas, tal vez incluso en el top 5 de kdramas.